En un primer paso importante, Katja Wiese, directora general de la organización, quiere plantar 100.000 árboles en Costa Rica en los próximos años junto con sus socios, la Universidad de Ciencias Aplicadas de Berlín Beuth y la Fundación de Universidad de Golfito local.
"El puente climático verde es una protección eficaz de las especies y del clima al mismo tiempo", subraya. A través del proyecto, se protegen los restos de selva tropical que quedan y se plantan nuevos árboles. Como reservorios de CO2, tanto los bosques conservados como las zonas reforestadas son claves para la protección del clima. Al mismo tiempo, el corredor previsto fomentará de forma decisiva el intercambio de especies entre el Parque Nacional de Corcovado, situado en la costa del Pacífico, y el Parque Nacional de La Amistad, en las tierras altas.
Se trata de salvar una distancia de 80 kilómetros. Aquí todavía hay muchos remanentes de bosque, algunos conectados entre sí, otros no muy alejados, con pastos abiertos en medio que necesitan ser reforestados. Las tierras gestionadas de forma sostenible también pueden contribuir al puente previsto.
"Compraremos tierras, las arrendaremos y ayudaremos a los agricultores a practicar una agricultura sostenible. Cada parcela que podamos ganar de este modo contribuirá en una especie de mosaico a la creación del puente climático verde pieza a pieza", explica Katja Wiese en su plan a largo plazo. "Empezaremos con 600 hectáreas de tierra, que actualmente están a la venta, y 100.000 plantaciones de árboles", explica además.
Costa Rica es rica en parques nacionales y ha colocado cerca de una cuarta parte de su superficie bajo conservación de la naturaleza. Sin embargo, la naturaleza está amenazada por la presión de los asentamientos, el pastoreo y las plantaciones, y sobre todo por la caza furtiva y la tala. Los dos parques nacionales que se van a relacionar son el Parque Nacional del Corcovado, situado en el sur de Costa Rica, que protege una de las últimas selvas tropicales de tierras bajas del mundo en más de 40.000 hectáreas. Aquí viven especies raras como el jaguar, el tapir y el águila arpía. En el altiplano central se encuentra el segundo, el Parque Nacional "de la Amistad" La Amistad, que se extiende desde Costa Rica hasta la frontera con Panamá. Esta zona protegida contiene las montañas de Talamanca, bosques nubosos y selvas tropicales con una increíble variedad de especies animales y vegetales. La Amistad es el mayor parque nacional de Costa Rica y es Patrimonio de la Humanidad desde 1983.
Además de las donaciones directas, las compensaciones del Certificado Planeta Azul también llegan al proyecto. Con este certificado climático, Naturefund ofrece a empresas, organizaciones y particulares la oportunidad de compensar sus emisiones de CO2 causadas por viajes o eventos mediante la plantación de árboles: un medio transparente y eficaz de protección del clima.